Hace ya tiempo que quería ponerme en contacto contigo para agradecerte la atención que me prestaste.
Los problemas por los que consulté contigo han desaparecido, repetí los análisis que me propusiste, la homocisteina , leucocitos…., ya estaban dentro de los niveles normales. Me encuentro bien, gracias a haber consultado contigo y, aunque siempre tenía en mente decírtelo, el tiempo es limitado y, a veces, es complicado encontrar el momento adecuado.
Te estoy muy agradecida. Un abrazo
Mª. Jesús D. (Salamanca)
Acabo de terminar la maratón de Sevilla y la verdad que estoy súper contento, hace 2 años no pensaba ni volver a correr... muchísimas gracias por todo..
Un abrazo Iñaki A (Navarra).
Hola Teresa,
te escribo este email para decirte que cada día estoy mejor. Quería darte las gracias por haberme ayudado en este proceso de sanación. Jamás pensé que tuviera tanto que ver con la nutrición, con problemas en el sistema digestivo y con la falta de absorción de minerales y vitaminas. Ha sido una revelación tan grande que me he puesto a estudiar nutrición Lo dicho, mil gracias por tu ayuda y por tus conocimientos
Carolina T.P. (Madrid)
Tengo 36 años. Soy médico. Acudí a Teresa por un brote muy severo de Espondilitis Anquilosante. Llevaba 6 meses con inmunosupresores, que me habían ido aumentando, dado que mis articulaciones seguían inflamadas y el dolor no cedía. El trato fue excepcional desde el momento de pedir la cita. Antes de reunirme con ella tuve que rellenar 3 exhaustivos cuestionarios, sobre toda mi vida, hábitos, infancia, alimentación, enfermedades, etc, así como enviarle las analiticas de las que disponía. Ella se estudió a fondo mi caso antes de que acudiese a su consulta.
Cuando acudí a su consulta me comentó que debíamos tratar LA CAUSA de mi enfermedad y no solo los síntomas, que es lo que hacen los inmunosupresores, además de tener efectos secundarios. Me ha propuesto una dieta antiinflamatoria eliminando los posibles alimentos que están causando el brote, dado que mi enfermedad tiene su inicio o punto gatillo en el intestino, y ahí es donde tenemos que actuar. Es una dieta rigurosa pero no estoy pasando hambre, y poco a poco voy acostumbrandome a una nueva forma de alimentarme. Llevo poco tiempo pero ya me encuentro mejor.
Gracias por tu ayuda, Teresa
P.S.C. (Vitoria)
Era un cúmulo de síntomas cuando decidí confiar en Teresa... peregrinar por reumatólogo... psiquiatra....traumatólogos ...el año 2014 quería morir : cansancio muscular.. diarreas.. mucha ansiedad..stress..fibromialgia y celiaquia...el dolor físico era debilitador ..ni mi hija me animaba..
Decidí ponerme en manos de Teresa...su actitud de ayuda..su confianza científica en mi recuperación y sobre todo no hacerme sentir culpable por mi dolor emocional me dio una esperanza para seguir ..
Ahora en tres meses sí llega..aún estoy débil pero puedo estar a diario sin dolor, ya no tomo antidepresivos, estoy cocinando y quiero aprender muchas cosas para seguir para adelante...
He vuelto a nacer...muchísimas gracias...
Angeles Gallardo (Madrid)
Acudí a la consulta de Teresa con mi hija de 2 años que sufría dermatitis atópica (eczema) y picores constantes en todo el cuerpo. Los médicos únicamente me habían dado como solución cremas de cortisona (que funcionaban, pero como advertía el mismo médico, eran malos para la piel a largo plazo) y una dosis de antihistiminicos 3 veces al día (no funcionaban, y me parecía excesivo para una niña tan pequeña). Me aconsejaron que cambiarle la dieta era muy difícil y además no daría resultado.
Antes de la consulta Teresa me pidió que apuntara todo lo que comía la niña durante unos días, y que le facilitara toda la información sobre su historial de salud. La consulta fue muy exhaustiva y Teresa aconsejó que elimináramos gluten, lácteos y levaduras de la dieta de la niña, y que intentáramos aumentar su consumo de verduras (comía bastante mal entonces) y darle siempre proteínas y grasas (de las buenas) en cada comida y tentempié para mantener estable el azúcar en sangre. También mandó suplementos naturales (vitaminas, probióticos y otras cosas). Después de 2 o 3 meses en este régimen el dermatitis y los picores habían desaparecido por completo. La niña dormía bien por primera vez en su vida, era menos irritable y comía mucho mejor. Seguir la dieta es un esfuerzo, pero con el tiempo te acostumbras y tener una niña sana y feliz compensa ese esfuerzo con creces. Lo que hace Teresa, a diferencia de los médicos, es estudiar cada aspecto de la salud del paciente y como se relacionan entre sí. De esta mañera llega a la raíz del problema y consigue mejores resultados y sin medicamentos. Muchas gracias Teresa.
U. Theobald (Madrid)
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